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Zahara de la Sierra, un deslumbrante pueblo blanco en las colinas de Cádiz, combina historia y naturaleza en el corazón del sur de la Península Ibérica. Situado en lo alto de una colina rocosa, este encantador enclave deslumbra con su embalse turquesa de Zahara-El Gastor y el exuberante Parque Natural de la Sierra de Grazalema, designado Reserva de la Biosfera por la UNESCO en 1977. Sus ruinas de un castillo árabe y su torre del siglo XV evocan su pasado como fortaleza medieval.
Entre sus encantos, destacan las estrechas calles adornadas con balcones floridos, la pintoresca iglesia de Santa María de la Mesa y las panorámicas inigualables. Además, Zahara es un punto de partida ideal para aventuras como el senderismo, el ciclismo y el kayak, ofreciendo múltiples formas de disfrutar su entorno natural.
Un dato curioso: aunque muchos creen que el nombre "Zahara" proviene de azahar, palabra árabe para "flor de cítricos", estudios indican que deriva de sahra, que significa "tierra salvaje o estéril", en alusión a su ubicación rocosa. Parte de la famosa Ruta de los Pueblos Blancos, Zahara de la Sierra ofrece una experiencia única en uno de los paisajes más bellos de nuestro país.