© Leighton Collins/Alamy
Guiando el camino desde 1860
En la imagen de hoy se alza el imponente faro de Porthcawl, en Gales, que desde 1860 desafía el poder de un mar tormentoso y la fuerza de olas colosales que impactan sin cesar su sólida base. Este emblemático faro fue construido para guiar el creciente tráfico marítimo en el peligroso Canal de Bristol. Su ubicación en la escarpada costa de Porthcawl siempre ha representado un reto extremo para los marineros. Famoso por las espectaculares fotografías en las que aparece siendo golpeado por olas descomunales, este faro, el último del Reino Unido en ser alimentado por carbón y gas, conserva un innegable encanto histórico, incluso tras su conversión a electricidad en 1997.
En España, el Faro de Finisterre, en la costa de Galicia y conocido en la antigüedad como el “fin del mundo,” ofrece una experiencia similar. Con vistas inigualables al Atlántico, este icónico faro es un destino popular para los peregrinos que prolongan su viaje más allá de Santiago de Compostela. ¡No pierdas la oportunidad de visitar estos impresionantes faros!